En marzo de 2024 anunciamos la creación de la Coordinadora Juvenil Socialista, una organización para el rearme político de la juventud trabajadora. Nuestro objetivo, como dijimos entonces, es contribuir a la construcción de una alternativa política a la barbarie capitalista.
Cuatro meses después, la organización ha sido presentada en 16 ciudades, atrayendo a miles de jóvenes que aspiran a romper con el régimen de pasividad e impotencia al que querrían condenarnos. Una nueva generación militante que comienza a alzar su voz, que quiere aprender de los errores del pasado y superar las limitaciones que nos han lastrado, y que entiende la organización política socialista como la herramienta que podrá liberarnos de un futuro de guerra, autoritarismo, pobreza y catástrofes.
Este es solo un primer paso. Somos conscientes del tamaño de las tareas que nos proponemos, de lo terrorífico de las dificultades, del inmenso poder de los enemigos a los que nos enfrentamos. Ellos tienen todo el dinero, todos los Estados y todas las armas. Pero nosotros tenemos la organización, la teoría y la experiencia histórica de la lucha revolucionaria. Tenemos la fuerza de una clase que será imparable cuando se dote de las herramientas necesarias para librarse de sus cadenas.